ALEGORIAS URBANAS:
LOS HÍBRIDOS
DE VINZ
El 15 de diciembre se inaugura en la sala expositiva L'Arteria (c/Conde de Altea n°5, Valencia) la exposición de uno de los mayores street artist de Valencia: Vinz. Hemos encontrado a Vinz en su estudio en el barrio de Russafa para una entrevista sobre su proyecto «Feel Free», un recorrido alegórico hecho de posters y pinturas que se encuentran puestos sobre los muros de las típicas callecitas del centro de la ciudad.
En contraposición al arte expuesta en un museo que requiere la máxima concentración del observador, la obra de Vinz permite de aprender en distracción. El caminante, absorto en su dimensión cotidiana, lanza su visión fugaz en la pared cubierta por carteles de este joven artista: las imágenes de los híbridos, los cuerpos de hombres y mujeres desnudos con cabezas de animales, le impone una reflexión sobre su condición y el destino la ciudad que lo rodea.
Pero ahora dejamos la palabra a Vinz …
Cómo nació el proyecto que está todavía en curso «Feel Free»? Vivimos en un tiempo de cambio. El miedo, la inseguridad y el futuro incierto alimentan la represión y debilitan el progreso. No podemos quedarnos quietos. Reivindicar los logros alcanzados, defender nuestros derechos, tomar las calles si es necesario.
Eso, traducido al mundo artístico, es el street art. El proyecto «Feel Free» nació a principios de 2011 con la intención de despertar la conciencia colectiva, sentirse libre para expresarse, vivir la vida en multicolor.
Los híbridos de "Feel Free", son alegorías que expresan otro, más allá de la imagen representada. ¿Cuál es el significado?
Parte de la magia reside en que el espectador interprete lo que vé según lo sienta. Puedo explicar el origen. Tomé la idea de las cabezas de ave y las personas desnudas como símbolo de libertad, naturaleza, humanidad carnal.
El primer momento de desobediencia en la Historia lo encontramos en el Génesis. El pecado original. Adán y Eva desafían a Dios y este les tapa los genitales con hojas de parra impidiendo que muestren su desnudez.
¿En qué medida afectan a tu proyecto actual las vanguardias artísticas, experiencias de '900?
Las vanguardias siempre han coincidido en el tiempo con momentos de cambio. Las de 1900 fueron las primeras. El pop Art de los años 70 podrían considerarse las segundas vanguardias. Rodeadas de movimientos contraculturales, el pacifismo, el feminismo, ecologismo, Rock&Roll, movimiento hippie…
Como he dicho, vivimos en un tiempo de cambio. Creo realmente que el street art es la evolución lógica de la pintura, en conexión con los movimientos underground actuales en diversos ámbitos. Creo que estamos viviendo las terceras vanguardias.
Edificios abandonados, cines abandonados, lugares sujetos a la especulación ... la elección de los lugares en los que publicas tus obras no aparecen al azar. ¿Verdad?
Siempre intento intervenir sobre lugares abandonados o sin propietario. Creo que el trabajo en la calle agrega un componente de reflexión a la obra sobre lo público y lo privado. Me permite no tener que pedir permiso a la hora de intervenir, y llamar la atención de lugares que deberían estar ocupados pero, como tú dices, suelen estar sujetos a especulación.
Te consideras, por tanto, un artista activista? ¿Por qué has decidido “participar” en la campaña electoral?
Considerarse un artista en España es como decir públicamente que eres un vago, un delincuente, un timador. Estamos muy mal vistos públicamente. La mayoría nos definimos como ilustradores o diseñadores. En Inglaterra es diferente. La gente te escucha si dices que eres artista, entienden que posees una formación universitaria, unos conocimientos, que eres un creador. En Estados Unidos aunque no lo parezca, es aún mejor, puedes llegar incluso a presidente.
Lo de activista va unido al street art de denuncia, arte de guerrilla se le llama también.
Me tomé muy en serio estas elecciones. Había un desencanto general por la claridad con la que la Derecha iba a ganar de una forma aplastante. Aún así, quería reivindicar la importancia del voto.
Nuestra democracia es relativamente joven, pero la gente ya ha olvidado lo que es vivir bajo una dictadura. Si dejamos de votar, si abandonamos este sistema podrido en vez de intentar mejorarlo, es muy fácil que llegue de nuevo un militar con aires de grandeza y nos plante una dictadura otra vez.Mis propuestas eran simples. VOTA. A quién tú quieras. Lee los programas electorales, y vota a quién tu creas que lo puede hacer un poquito mejor. Pero no olvides lo que se ha conseguido hasta ahora y ha costado tanto. Todo puede volar de un plumazo si abandonamos la lucha.
La película dirigida por el representante mayormente conocido en el mundo de street art Banksy, muestra que a través de la reproducción técnica de una obra de arte, debidamente acreditados por el capital financiero, la obra de la calle puede convertirse en un objeto de culto.¿Qué te parece? Es solamente una aparente contradicción?Es algo que tenemos quienes compartimos una pasión. Se llama fetichismo. En mi caso, soy un loco obsesionado por el arte actual, y el street art en particular. Colecciono serigrafías y obra sobre papel de artistas callejeros de todo el mundo. Hay fetichistas-coleccionistas en todos los ámbitos (cine, música, fútbol, literatura…), se han llegado a pagar cantidades astronómicas por un pelo de Elvis.
La pasión nace del corazón. Lo que no dice la película de Banksy, es cuanta gente compra obra para especular, y cuantos lo hacen por pasión. Por otra parte es algo que no se puede controlar.
Hay algo que mucha gente, sobre todo aquí en España, no entiende todavía. El artista tiene que comer, pagar facturas, irse de copas, mantener una familia. Parece que, cuando un artista empieza a poder vivir de su obra, se le considera un vendido. Solo porque se gana el sueldo con su trabajo. En cambio, si trabaja de camarero, o en un trabajo no cualificado, es un artista más puro.
He seguido la obra de Banksy casi desde el principio, y aunque ahora seguramente ingrese mucho más dinero, creo que sigue siendo fiel a sus principios. Eso es lo importante: el mensaje de la obra, no el mensajero.
Muchos de tus colegas eligieron el anonimato construyendo de manera consciente un personaje misterioso. ¿Cómo te pones con respecto a esta actitud?
En mi caso no se trata de mantener el misterio. Cualquiera que venga a mis exposiciones, o me vea interviniendo en la calle puede conocerme y hablar conmigo. Las fotos y videos son otra cosa. Algunas cosas que hago no son muy legales, y si algún día los lagartos se ponen a investigar, no me gustaría que encontraran una foto de mi cara. Hay que ponérselo difícil.
¿Has tenido algunas vez problemas con la ley mientras ponías tus obras en las paredes de la ciudad?
Je je. Por ahora, no. Toco madera. Por suerte siempre tengo dos pares de ojos velando por mi seguridad.
El saboteador y fetichista. Son estas, y otras tal vez, las personas que entran más en contacto directo con sus obras. La primera todavía anclada a la que se le dice “campaña de la hoja de parra” organizada por la iglesia católica para cubrir la desnudez en el arte, la segunda rasga de las paredes tu propio trabajo para enriquecer su colección privada, o quién sabe con qué otros propósitos. ¿Qué podemos decir a estas personas para que dejen en paz , por fin, tus híbridos?
Siempre me gustó la interacción entre la obra y el público. Las calles están llenas de anuncios y señales que te dicen donde ir, qué comprar. Eso no debería ser un monólogo. Si la reacción del público es negativa, también tienen derecho a manifestarlo. Es parte del juego. Pero ojalá no fueran tan exagerados y destructivos. Impiden el disfrute de otros que sí la valoran.A los fetichistas, les diría que pueden adquirir una obra mía a través de internet, en exposiciones o locales autorizados. El street art es arte en la calle, y ese es su lugar. Es un tipo de arte barato para el que lo realiza y gratuito para el que lo contempla. Adquiriendo obra de un artista que te gusta, promueves que pueda seguir creando, y no tenga que volver a la barra de bar o a la hamburguesería.
Vinz, gracias por habernos abierto las puertas de tu estudio, te dejamos a tu trabajo ya que tu próxima inauguración està muy cercana. ¿Quiere decirnos algo sobre tus planes futuros?
Después, volveré a Valencia con un par de sorpresas en Marzo y Mayo. Y hasta aquí puedo leer. Un placer hablar con vosotros
